domingo, 26 de enero de 2020

La Ciencia Astrológica de los Reyes Magos, y Jesús es la Estrella radiante de la mañana


La Ciencia Astrológica de los Reyes Magos, y Jesús es la Estrella radiante de la mañana
Por
Angel R. Cepeda Dovala

Aunque la Astrología como ciencia es vigente en distintas culturas, la versión moderna es la Astronomía, de tal forma que podemos hablar de la Astronomía de culturas y civilizaciones antiguas tales como las de Mesopotamia, Egipto, Grecia, Roma, China, de las culturas prehispánicas en México; tiempo después, jugaron un papel muy importante en la nueva ciencia astronómica, diversos científicos de distintas nacionalidades, por mencionar: Nicolás Copérnico (1473-1543), Galileo Galilei (1564-1642), Johannes Kepler (1571-1630), Isaac Newton (1642-1727), y muchos otros.

Se puede decir, desde un punto de vista científico religioso, que, en la Biblia, en el Nuevo Testamento, y con mucho mayor precisión, en el Evangelio de San Mateo (Mt 2, 1-12), se encuentra una de las partes más sublimes, del Astrología, la ciencia que conocían los Reyes Magos, que vieron la Estrella del Oriente, y la siguieron, hasta detenerse en Belén, el pesebre donde se encontraba el niño Jesús, y llegaron para adorarlo y darle los regalos. Se cumplió la profecía de Miqueas. Pues en Belén Efratá nació Jesucristo (Cf. Mi 5, 1).

La ciencia astrológica de los Reyes Magos, (Mt 2, 1-12), no tiene nada que ver con la adivinación, adivinos, o con la hechicería, mencionada por los Profetas Isaías, Daniel, Miqueas, Nahúm, y Zacarías (Cf. Is 65, 4; Is 2, 6; Mi 5, 11; Nah 3,4; Dan 2, 2; Za 10, 2). También debemos recordar, que, desde el Antiguo Testamento, en tres libros del Pentateuco: Éxodo, Levítico y Deuteronomio, estaba prohibida la magia con pena de muerte (Cf. Los códigos en Éx 23, Lev 19, y Dt 18), y se rechazó el sacrificio abominable de niños (Cf. Dt 18).

Cabe mencionar, que en numerosos y distintos relatos bíblicos, Dios, actuó a través de personas, y el poder divino se manifestó para confundir a magos y adivinos, por ejemplo, en Moisés contra los magos de Egipto (Cf. Éx 7, 10-13 y 19, 23), y en Daniel (Cf. Dan 2; 4; 5; 14). Años más tarde, Jesús de Nazaret, muestra su superioridad por ser hijo de Dios, Uno y Trino, sobre la obscura fuerza de la adivinación y magia.

Pero, regresemos a los Reyes Magos y recordemos que se llenaron de alegría al ver la Estrella, y al entrar a casa vieron al niño con su madre María (Cf Mt 2, 10 11); y que Jesús dijo, acorde con el libro de Apocalipsis de Juan, que él era descendiente de David, el Lucero radiante del alba, es la Estrella radiante de la mañana para que despunte en nuestros corazones. (Cf Ap 22, 16; Is 14, 12; y 2 Pe 1, 19).

Paz y Bien
ARCD
2020/01/26