El Año de la
Misericordia 2015-2016 y el Cuarto Domingo de Adviento
Por
Angel R. Cepeda
Dovala
«Dichosos los
misericordiosos, porque encontrarán misericordia » (Mt 5,7)
En
el tercer año del Pontificado del Papa Francisco, en Roma, junto a San Pedro,
con fecha 11 de abril de 2015, durante la Vigilia del Segundo Domingo de
Pascua, dio a conocer el Jubileo de la Misericordia mediante el anuncio del
documento pontificio denominado: Misericordiae Vultus, el cual es una Bula de
Convocación del Jubileo Extraordinario de la Misericordia, en el cual el Obispo
de Roma Francisco Siervo de los Siervos de Dios, nos dice en el documento
inicial para los que lean esta carta: Gracia, Misericordia y Paz. El lema del
Año jubilar de la Misericordia es: “Misericordiosos como el Padre”. En la
misericordia tenemos la prueba de cómo Dios ama. Él da todo sí mismo, por
siempre, gratuitamente y sin pedir nada a cambio. Viene en nuestra ayuda cuando
lo invocamos.
El
8 de diciembre de 2015, dio inicio el Jubileo Extraordinario de la
Misericordia, es el Día de la Inmaculada Concepción, en el quincuagésimo aniversario
del Concilio Ecuménico Vaticano II, y el Papa Francisco abrió la Puerta Santa; el Año Jubilar concluirá en la Solemnidad Litúrgica
de Jesucristo Rey del Universo, el 20 de noviembre de 2016, y en este día se
cerrará la Puerta Santa, de este Año Santo.
En
este Cuarto Domingo de Adviento fue la Anunciación a la Virgen María, pues el
Profeta Miqueas anunciaba el Nacimiento del Niño Jesús en Belén, y después de
800 años el Oráculo del Profeta Miqueas sirvió de guía a los Magos llegaran a
tan importante acontecimiento (Cf. Miqueas 5, 1-4). San Pablo en su Carta a los
Hebreos, nos revela la disposición del Hijo de Dios al entrar al mundo
terrenal: “Aquí estoy Dios mío, vengo para hacer tu voluntad” (Cf. Carta a los
Hebreos 10, 5-10). Y el Santo Evangelio según San Lucas en la Misa Dominical
saludamos a la Virgen María junto con Isabel al exclamar “¡Bendita tu entre las
mujeres y bendito el fruto de tu vientre!” (Cf. Lucas 1, 39-45). El Santo Padre
Francisco recordó que en Navidad, Dios se nos da completamente a sí mismo,
donando a su Hijo, Él Único, que es toda su alegría.
Tópicos
Culturales recomienda leer el texto completo de la Bula del Papa Francisco y
tenerlo presente durante este Año Santo:
Misericordiae
Vultus. Bula de Convocación del Jubileo Extraordinario de la Misericordia
Y
también meditar el Ángelus del Papa en este Cuarto Domingo de Adviento:
Ángelus
del Papa: en Navidad Dios se nos da a sí mismo donando a su Hijo
Y
recordemos:
« Sed
misericordiosos, como el Padre vuestro es misericordioso » (Lc 6,36)
Paz y Bien
ARCD
20/12/2015