domingo, 23 de septiembre de 2012

Los Siete Dolores de María Santísima Virgen Dolorosa

Los Siete Dolores de María Santísima Virgen Dolorosa 

Por

Ángel R. Cepeda Dovala

La Iglesia Católica conmemora los Dolores de la Santísima Virgen María durante dos ocasiones al año, la primera de ellas es la más antigua y se conmemora en la Semana de la Pasión, y la segunda conmemoración es más reciente y se celebra el 15 de Septiembre a Memoria de la Virgen Dolorosa, considerando la Exhortación Apostólica Marianis Cultus, Pablo VI que data del 2 de Febrero de 1974. [1]. Existen distintas versiones de rezar los Siete Dolores, pero todas mantienen lo indicado con letras negritas, cambiando el estilo, llamándosele también Corona Dolorosa, o Rosario de los 7 Dolores. [2]. La Virgen comunicó a Santa Brígida de Suecia (1303-1373): "Miro a todos los que viven en el mundo para ver si hay quien se compadezca de Mí y medite mi dolor, mas hallo poquísimos que piensen en mi tribulación y padecimientos. Por eso tú, hija mía, no te olvides de Mí que soy olvidada y menospreciada por muchos. Mira mi dolor e imítame en lo que pudieres. Considera mis angustias y mis lágrimas y duélete de que sean tan pocos los amigos de Dios." [3].

1º. La profecía de Simeón (Lc. 2, 22-35) ¡Dulce Madre mía! Al presentar a Jesús en el templo, la profecía del anciano Simeón te sumergió en profundo dolor al oírle decir: “Este Niño está puesto para ruina y resurrección de muchos de Israel, y una espada traspasará tu alma”. De este modo quiso el Señor mezclar tu gozo con tan triste recuerdo. Rezar: Padrenuestro, Avemaría y Gloria.

2º. La persecución de Herodes y la huida a Egipto (Mt. 2, 13-15) ¡Oh Virgen querida!, quiero acompañarte en las fatigas, trabajos y sobresaltos que sufriste al huir a Egipto en compañía de San José para poner a salvo la vida del Niño Dios. Rezar: Padrenuestro, Avemaría y Gloria.

3º. Jesús perdido en el Templo, por tres días (Lc. 2, 41-50) ¡Virgen Inmaculada! ¿Quién podrá pasar y calcular el tormento que ocasionó la pérdida de Jesús y las lágrimas derramadas en aquellos tres largos días? Déjame, Virgen mía, que yo las recoja, las guarde en mi corazón y me sirva de holocausto y agradecimiento para contigo. Rezar: Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.

4º. María encuentra a Jesús, cargado con la Cruz (Vía Crucis, 4ª estación) Verdaderamente, calle de la amargura fue aquella en que encontraste a Jesús tan sucio, afeado y desgarrado, cargado con la cruz que se hizo responsable de todos los pecados de los hombres, cometidos y por cometer. ¡Pobre Madre! Quiero consolarte enjugando tus lágrimas con mi amor. Rezar: Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.

5º. La Crucifixión y Muerte de Nuestro Señor (Jn. 19, 17-30) María, Reina de los mártires, el dolor y el amor son la fuerza que los lleva tras Jesús, ¡qué horrible tormento al contemplar la crueldad de aquellos esbirros del infierno traspasando con duros clavos los pies y manos del salvador! Todo lo sufriste por mi amor. Gracias, Madre mía, gracias. Rezar: Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.

6º. María recibe a Jesús bajado de la Cruz (Mc. 15, 42-46) Jesús muerto en brazos de María. ¿Qué sentías Madre? ¿Recordabas cuando Él era pequeño y lo acurrucabas en tus brazos? Por este dolor te pido, Madre mía, morir entre tus brazos. Rezar: Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.

7º. La sepultura de Jesús (Jn. 19, 38-42) Acompañas a tu Hijo al sepulcro y debes dejarlo allí, solo. Ahora tu dolor aumenta, tienes que volver entre los hombres, los que te hemos matado al Hijo, porque Él murió por todos nuestros pecados. Y Tú nos perdonas y nos amas. Madre mía perdón, misericordia. Rezar: Padrenuestro, Avemaría y Gloria al Padre.

PAZ Y BIEN

ARCD

Notas

[1] Cf. Exhortación Apostólica Marialis Cultus de su Santidad Pablo VI para la recta ordenación y desarrollo del culto a la Santísima Virgen María, en:


[2] Cf. Devocionario Católico. Nuestra Señora de los Dolores. 2. Corona De Los 7 Dolores, en:

Cf. Rosario de los 7 Dolores, en:

Cf. Los 7 dolores de Santa Madre de Dios la Virgen Maria, en:

[3] Cf. Devoción, en www.corazones.org