viernes, 23 de agosto de 2013

Reflexión sobre el Corazón de Piedra y el Perdón

Reflexión sobre el Corazón de Piedra y el Perdón
 
Por
 
Angel R. Cepeda Dovala
 
En Junio, 24, 2013 se publicó en Tópicos Culturales: Lew Wallace y Ben Hur [1], basados en el pensamiento de este extraordinario novelista, y en la Película de Ben Hur en los tiempos de Cristo, es una excelente novela que trata de una familia de la Religión Judía en donde Judá Ben-Hur y su familia son agredidos por un incidente al caer una teja de su casa y sus bienes son confiscados por los romanos encabezados por Messala quien había sido uno de sus mejores amigos desde la niñez. Ben-Hur es enviado a trabajar como esclavo en las galeras, un tipo de buque de guerra impulsado por remos, y su Madre y Hermana fueron enviados a una celda en donde contraen la lepra. Judá endurece su corazón y jura vengarse contra Messala.
 
En la galera, Ben-Hur conoce al primer cónsul de Roma: Quinto Arrio, quien en sus diálogos le dice que piensa como como un auténtico romano pues ve en sus ojos el odio y la sed de venganza, posteriormente Ben salva la vida a Quinto en una batalla naval en la cual la galera se hunde. Como gratitud del cónsul romano Arrio hacia Judá, lo adopta como su hijo, con lo que obtiene su estatus de hombre libre, y pasa el tiempo y Ben-Hur y retorna a su amor, una bella mujer llamada Esther.
 
Esther le comenta a Ben-Hur, que había escuchado las palabras de un hombre de Jesús de Nazaret, el mismo que le dio agua de beber a Ben–Hur en su calidad de esclavo encadenado, y en el suelo, cuando pidió la ayuda de Dios, se le apareció Cristo y le dio agua, pero Ben- Hur, no ligo en ese momento la ayuda de Cristo cuando fue esclavo y lo auxilio con agua, sin embargo, Ester le comentó a Ben-Hur las palabras que conocemos como el Sermón de la Montaña: “Benditos los que sienten compasión, pues ellos tendrán compasión”, “Benditos los que buscan la paz, pues serán llamados hijos de Dios”, Ester continua diciendo otras palabras de Jesús de Nazaret: “Amen a sus enemigos y oren por los que los persiguen”, pero Ben-Hur, reacciona lleno de odio y rabia por las palabras que le dice su amada Esther,  la cual le lanza a su amado una interrogante y unos comentarios: ¿Qué ha sido de Judá Ben-Hur a quien yo amaba? Parece ser que te has convertido en lo mismo que te propones destruir, devolviendo maldad por maldad. El odio te ha convertido el corazón en piedra. Actúas de la misma forma en que lo haría Messala.
 
¿Cuantas veces en la vida reaccionamos con ira o con odio ante un problema?, ¿Nos estamos volviendo como Ben-Hur?, o ¿No estamos volviendo como la persona o personas que nos ofendieron o hirieron?, ¿Cómo Messala?, ¿Estará el odio endureciendo el corazón y transformando su corazón noble en corazón de piedra?, Cuándo una Comunidad Universitaria es atropellada en todos sus derechos universitarios, inclusive el Estado de Derecho, y no se reacciona para corregir ¿Es porque su corazón se ha endurecido y es de piedra igual que el odio de una autoridad siente por su comunidad?
 
Dios quiere nuestra Libertad, Paz, Bien, Armonía, Trabajo, Amor y Felicidad, y lo hace constantemente de la misma forma que le paso a Ben-Hur quien llego a Jerusalén el mismo día en que Jesús fue llevado a la crucifixión al Monte Calvario o Gólgota, y Ben-Hur reconoce a Él Cristo y exclama: ¡Yo conozco a este hombre!, y en una de las caídas de Cristo, le trata de dar agua y los romanos se lo impidieron,  y luego ve correr hasta el suelo la preciosísima sangre de Jesucristo cuando está en la cruz, entonces el estar mirando, el Amor del Hijo de Dios comienza a penetrar en su corazón y es cuando su semblante se transforma y comienza a creer, pues su odio, la ira y la amargura fueron lavados y limpiados por el amor y la sangre del cuerpo lacerado por la tortura de  Jesús de Nazaret recibida de los romanos.
 
Si vieron la película de Ben-Hur protagonizada por Charlton Heston, en la escena final regresa a su casa donde estaba su amada Esther y le comenta que en el momento previo que de su muerte, escucho: “Padre perdónalos porque no saben lo que hacen”, y Ben Hur sintió como la voz de Jesús retiro la espada de su mano.
 
¿Tiene Ud., la espada de la amargura, el resentimiento, el odio y la ira en la mano?, ¿Por qué no dejamos que la voz de Jesús de Nazaret retire la espada de su mano? Lo invito a un recorrido al Monte Calvario o Gólgota y conozca lo que hizo Jesús por Ud.,  ¿Esta dispuesto a confesarle a Dios en el Gólgota, su amargura y resentimientos y pedirle humildemente lo perdone por su rechazo de perdonar? Y decirle también:¡ Dios mío, eterno y misericordioso! lo siento mucho por mi odio y resentimiento, he sido perdonado muchísimo, pero rehusado a perdonar a otros. Entonces deja que Él lave y limpie su corazón endurecido y lo haga de carne, y por la Gracia de Dios Ud., será libre si se decide a perdonar. [2]
 
PAZ Y BIEN
 
ARCD
 
Notas
 
[1] Cf. Lew Wallace y Ben-Hur, en:
 
[2] Cf. Intención a San Judas Tadeo y el Profeta Ezequiel, en: